El camino a la autoaceptación

Amarse a uno mismo siempre ha sido uno de los objetivos principales de los seres humanos, pero también uno de los más complicados, puesto que la autoaceptación no es algo que se obtiene y ya, sino es algo que se trabaja todos los días, se refuerza con acciones y con forme pasa el tiempo su sentido va cambiando.

Un amor propio saludable es aquel que parte de la premisa "Merezco todo aquello que me haga crecer como persona y ser feliz".

No hay felicidad completa sin amor propio (autoestima), no hay autoestima sin autoaceptación y esta no puede llegar a culminarse sin los siguientes cuatro pilares: Autoconcepto (lo qué piensas de ti mismo), Autoimagen (cuánto te agradas), Autorreforzamiento (cuánto te premias y te permites hacer cosas) y Autoeficacia (cuánta confianza tienes en ti mismo). Cuando aprendemos a darle lugar e importancia a cada una de estas estructuras nuestro "yo" se va fortaleciendo y creando un vinculo saludable y real con nosotros mismos, manteniéndonos fieles a nuestro propio ser, sin imitar, sin comparaciones, habitando nuestro cuerpo a través del respeto, confiando en el potencial que llevamos dentro, haciendo todo lo que nos corresponde para vivirnos libres y auténticos. Es importante aprender a distinguir quienes somos y como somos, para liberarnos de etiquetas, quitándonos adjetivos, para poder dejar de lado todo lo que no somos y lo que no nos pertenece, ya que cada uno de nosotros ha ido creando su propia sentencia donde cada día se castiga muy a su manera por no ser, actuar o sentir de tal manera.

Es decir solemos creer que experimentamos interiormente a nivel cognitivo y emocional nos define por completo, que nuestras acciones hablan por nosotros, que somos nuestra familia, nuestro trabajo, las amistades que frecuentamos e incluso el lugar en que vivimos, pero no es así. Aunque nuestro entorno juega un papel muy importante nuestra totalidad y esencia no se reduce solo a eso.

No te compares, no te juzgues ni seas tan duro contigo mismo; el enemigo no está afuera, si no dentro de ti.

No te castigues o te culpes por lo que has vivido, no te arrepientas de las decisiones que has tomado, deja de ser tu propia victima, no tiene caso encontrar culpables, busca soluciones y acepta el aprendizaje.

Si tu quieres liberarte y comenzar a experimentar una felicidad real, te sugiero que hoy inicies por trabajar tu autoconcepto, es decir lo que piensas de ti, ya que tu autopercepción esta totalmente ligada a la forma en que te tratas, lo que te permites y lo sobre lo que te quitas.

* Si te interesa comenzar que este trabajo personal déjame un mensaje y te haré llegar tu actividad totalmente gratis.